El Parque nacional del Mercantour, un cielo rebosante de estrellas

En el Parque nacional del Mercantour, «Alpes Azur Mercantour» es una tierra excepcional para la astronomía, reconocida desde finales del siglo xix. En 2019, el territorio incluso integró el restringido círculo de las quince Reservas internacionales de cielo estrellado distinguidas en todo el mundo.

La calidad del cielo nocturno sobrecogerá a los visitantes del Parque nacional del Mercantour. Gracias a ella, el territorio «Alpes Azur Mercantour» ha sido reconocido como Reserva internacional de cielo estrellado, la tercera de ese tipo en Francia, tras la del pico del Midi de Bigorre en el Parque nacional de los Pirineos y la del Parque nacional de las Cevenas. 

El Parque ofrece una amplia gama de excursiones y actividades para descubrir la vida nocturna y los secretos de la Vía Láctea. Su programa incluye, por ejemplo, caminatas de noche con un guía de alta montaña, paseos con raquetas en invierno o incluso observaciones estáticas. ¡Lo más difícil será elegir la actividad para maravillarse ante el cielo estrellado, una experiencia única para vivir en el Mercantour!

Sitios emblemáticos para acoger a los visitantes

Desde la meseta de Calern hasta las alturas del monte Mounier, pasando por la cima del Aspre, el puerto de la Bonette-Restefond y el valle de la Moutière, los sitios emblemáticos del Parque nacional del Mercantour para contemplar las estrellas son innumerables. Hoy en día, algunos siguen acogiendo a numerosos astrónomos, profesionales o aficionados, que encuentran en ellos las condiciones ideales para sus actividades de investigación, exploración, sensibilización y educación.

Dejarse mimar por la luna, tanto en verano como en invierno

En todas las estaciones, la luna interpreta una hermosa partitura en la naturaleza del Mercantour. En invierno, permite ver de noche como si fuera pleno día gracias a su reflejo en el manto de nieve. En verano, su aparición a la caída del sol ofrece un recuerdo imborrable. Gracias a unas condiciones de observación excepcionales, características de los entornos de montaña alejados de las ciudades y de cualquier contaminación lumínica, en el Mercantour encontrarás la pureza de un cielo mágico poblado de estrellas y constelaciones.

Senderismo deportivo en el monte Mounier

Desde lo alto de sus 2817 metros, el monte Mounier ocupa una posición central entre los valles de Var y Tinée. Esta cumbre majestuosa ofrece a los senderistas unas vistas que cortan el aliento, además de permitirles seguir las huellas de la fabulosa historia de la astronomía en el departamento de Alpes-Maritimes. En 1893, Raphaël Bischoffsheim construyó allí un observatorio, una operación excepcional para la época. Hoy, tras incendiarse y quedar destruido en dos ocasiones, ser reconstruido y finalmente abandonado, solo quedan sus ruinas.

La cima del Aspre: un refugio abierto sobre las montañas

Desde el magnífico caserío de Les Tourres, un sendero conduce a la cima del Aspre, situada a 2471 metros de altitud. El nombre de esta cumbre (“áspero”) le va de perlas, puesto que nada crece en esa cima donde arrecia el viento, salvo los vestigios de un antiguo observatorio que parece haber servido de prueba para la instalación de un telescopio, como una señal más de la pureza del cielo. En el verano de 2008 se llevaron a cabo obras para ofrecer a los visitantes un pequeño refugio abierto situado sobre las montañas.